Todos llegamos a un punto en nuestra vida donde tenemos una rutina y una forma de vida con la que estamos cómodos, de la que no esperamos nada, nuestra “zona de confort”, lugar en donde nos sentimos seguros y confiados; pero eso mismo que nos protege, también puede causarnos daño, estancarnos. No buscar nuevos retos puede hacer que te quedes atrapado, por esto es importante ser valiente y hacer cambios, dejar de lado el miedo a lo desconocido y buscar nuevas emociones, oportunidades y aprendizajes, pero, ¿cómo salir de la zona de confort?

El salir de nuestra zona de comodidad puede parecer una idea más aterradora de lo que realmente es, el poder hacer una actividad que siempre soñaste o atreverte a enfrentarte a nuevos retos como aprender a dibujar, a pintar o aprender otro idioma, hace que salgas de tu zona de confort y comiences un nuevo estilo de vida. Nada bueno puede resultar de quedarnos en el mismo lugar donde nunca pasa nada, recuerda siempre la frase “solo se vive una vez”. Es lógico tener miedo, pero una vez que descubras todo lo que puedes hacer, será más fácil cada día.